MATRIMONIOS

20. EL AMOR ES JESUCRISTO

Mientras aún éramos débiles, a su tiempo Cristo murió por los impíos. (Romanos 5:6)

El desafío del amor comienza con la realización de que no podemos producir amor incondicional por nosotros mismos; es un regalo de Dios. Jesús vino a buscarnos y salvarnos, y a través de Él, todos nuestros fracasos y errores pueden ser perdonados y restaurados. Todos somos pecadores, pero a través del sacrificio de Cristo en la cruz, podemos recibir el amor y el perdón de Dios.

Este amor no se puede ganar, sino que debe ser recibido como un regalo a través de la fe en Jesús. Una vez que aceptamos este amor, estamos libres para amar a los demás, incluido nuestro cónyuge, de manera incondicional. Este amor nos permite amar incluso cuando no somos amados a cambio y satisfacer las necesidades de nuestro cónyuge. El verdadero amor se encuentra en Cristo, y a través de Él, podemos vivir el desafío del amor.

 

Manos a la obra

Atrévete a tomarle la palabra a Dios. Atrévete a confiar en Jesucristo para la salvación. Atrévete a orar: «Señor Jesús, soy pecador; pero has demostrado tu amor por mí al morir para perdonar mis pecados, y has probado tu poder para salvarme de la muerte mediante tu resurrección. Cambia mi corazón y sálvame con tu gracia».

LISTADO DE SESIONES
Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad